Originariamente, el kumquat se clasificaba dentro de la familia de los cítricos, aunque luego consiguió su propio espacio gracias a Robert Fortune, que fue quien lo introdujo en Europa. Forma arbustos de hoja perenne y procede del sur de China. Hacia el año 1700, tuvo un gran auge en Japón, ya que allí se apreciaba tanto por sus cualidades ornamentales como por sus frutos comestibles. De todos modos, hacia mediados del siglo XIX sólo se cultivaba en Europa y Norteamérica como planta ornamental para patios e invernaderos. Ahora se cultiva en China, Japón, California y Florida, así como en otras zonas de clima subtropical. Puede cultivarse en un rango de temperaturas más amplio que la mayoría de los cítricos (desde 36 ºC hasta -10 ºC), ya que tolera mejor tanto el frío como el calor. De todos modos, tiene una apariencia, fisiología y uso similar al del resto de cítricos. Lo que lo hace peculiar es que su piel es comestible, y en algunas de sus especies esta puede llegar a ser incluso de mejor calidad que la carne.
Descripción
Arbusto pequeño, de crecimiento lento, compacto (2,5 m-4,5 m de longitud). Las ramas son de color verde claro, delgadas, angulosas y espinosas. Planta aromática.
Hojas: parecidas a las de los cítricos, de hoja perenne, simples, de 3 a 8,5 cm de longitud, dentadas desde el ápice hasta el centro, de color verde oscuro, brillantes en el haz y más claras en el envés, muy aromáticas.
Flores: de aroma dulce, nacen solas o en grupo (2-4), blancas, de 2,5 a 3,5 cm de diámetro. Son hermafroditas (masculinas y femeninas). Tienen cinco pequeños sépalos cóncavos que forman un cáliz verde y cinco pétalos blancos. Presentan numerosos estambres con anteras de color amarillo brillante. Tienen un ovario superior. Las flores nacen de primavera a verano. Polinización: las abejas y otros insectos son los encargados de polinizar el kumquat. Se autofecundan y dan bastante fruta, así que con un solo ejemplar ya se puede recolectar. Además, según la especie, muchas flores nos e polinizan, y producen frutos sin semillas.
Fruto: oval (1,5-4 cm de ancho). La piel es dorada, aunque cuando está madura se vuelve roja, con glándulas de aceite grandes y visibles. Es carnosa, fina y comestible, aunque la capa exterior es picante y la interior dulce. Pulpa: escasa, sólo tiene unos pocos segmentos, no muy jugosa, ácida, muy pocas semillas, pequeñas, puntiagudas, de color verde-blanco. Maduran lentamente mientras cambia de color.
Gastronomía
Sus frutos pueden usarse como elementos decorativos en otros platos y en la mesa, y a menudo se presentan en un racimo con todas sus brillantes y bonias hojas. La mayoría de sus frutos pueden comerse crudos, y tienen un sabor entre dulce, ácido, aromático y picante. También pueden cocinarse de distintas maneas, aunque es mejor hacerlo cuando han madurado del todo, para disfrutar así de todo su sabor. Pueden conservarse en almíbar, o bien caramelizarse dejándolos una noche en remojo en agua caliente o en bicarbonato de soda. Al día siguiente, córtelos por la mitad y cuézalos en almíbar durante poco tiempo, durante tres días seguidos; luego séquelos y añada el azúcar. Dan una mermelada excelente. Pueden conservarse en tarros conagua, vinagre y sal; selle el tallo paracialmente durante 4-5 días, cambie la salmuera y vuelva a cerrar el tarro durante 6-8 semanas. Puede cocinar una salsa de kumquat con trocitos cortados, miel, zumo de naranja, sal y mantequilla.
Nutrición
Tiene niveles altos de calcio y potasio, y buenas dosis de vitamina C (9-25 mg/100 g de carne), así como un poco de vitamina A. No tiene tanto valor nutricional como otros cítricos. Sus frutos presentan muchos de los beneficios de otras especies cítricas y su piel comestible también tiene los beneficios de la piel de los cítricos (prevención del cáncer de piel).
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